Salir de mi zona de conforte y enfrentarme al cambio siempre ha sido un reto para mí. A finales de 2019, decidí que me tenía que atrever, salir de mi rutina y afrontar lo desconocido. Fue de las mejores decisiones que tomé. Las experiencias que tuve, las personas y los lugares que conocí durante esos seis meses en Europa guardan un espacio muy importante en mi corazón. 
Me he dado cuenta de que todo pasa de momento y a la vez. Muchas veces se me hace difícil distinguir el paso del tiempo. Por tal razón, intento detenerme, observar y detener el tiempo con mis fotos para así poder regresar a ellas. 
Cada una de estas fotografías, aunque con historias distintas, comparten ese sentimiento de añoranza.
Back to Top